Secuestran a un productor en Arocena y lo liberan en Santo Tomé

Un contador público y su hijo, ambos de oriundos de la localidad de Arocena, fueron secuestrados por un grupo de al menos tres hombres en un campo de la zona rural de San Fabián. Se trata de Edgardo B. y Hernán B., quienes durante la tarde del miércoles vivieron un infierno en sus vidas.

El violento suceso ocurrió cerca de las 16, cuando Edgardo B. fue sorprendido por un grupo de sujetos que lo golpearon y posteriormente encapucharon.

«Me pidió que lo llamara a mi hijo. Yo lo llamé y vino. Antes de que llegara me encerró en un baño de una casa que tiene campo pero que no vive nadie», explicó el padre luego a la prensa, y aclaró que cuando llegó Hernán, lo golpearon y luego lo subieron a su camioneta Toyota Hilux blanca. “Me pidió rescate y me dijo que después iba a llamar”, dijo.

Horas después, cerca de las 20:30, el joven empresario rural de 36 años fue encontrado en cercanías del kilómetro 147 de la autopista Rosario-Santa Fe a la altura de la ciudad de Santo Tomé.

El joven estaba con pocas prendas de vestir, ensangrentado en la cara y con varios traumatismos de cráneo por lo que debió ser trasladado de urgencia al hospital Samco santotomesino. Sin embargo, ante la complejidad de las heridas, el cuerpo médico ordenó que sea llevado al hospital José María Cullen para ser curado.

En medio de ese contexto, agentes policiales de la reciente Agencia de Investigación Policial y personal policial de la Unidad Regional XV detuvieron, en medio de un operativo cerrojo, a uno de los principales sospechosos del caso.

Se trata de un sujeto que sería ex empleado de una de las víctimas. El mismo quedó en calidad de incomunicado y alojado en un calabozo de la Unidad Regional XV, con sede en la ciudad de Coronda.

Por el caso interviene el fiscal del departamento San Jerónimo, Marcelo Nessier, quien junto con su par de la Justicia federal, Gustavo Onel, a cargo de la Fiscalía Federal N° 1 y el ministro de Seguridad, Marcelo Sain, trabajaron en conjunto para llevar a cabo una serie de procedimientos durante las horas que duró el secuestro.

Momentáneamente, la causa fue caratulada como “robo calificado por el uso de arma de fuego, lesiones y privación ilegítima de la libertad”. No obstante, podría modificarse con el correr de las horas ya que los pesquisas que investigan el hecho buscan encontrar y peritar la indumentaria que tenía el detenido y a su vez peritar teléfonos secuestrados.

En tanto, los investigadores también buscan dar con la Hilux blanca -chapa patente AD571GB- que fue secuestrada y que por el momento no pudo ser encontrada.